Grifaldo Toledo, Jorge

lunes, 8 de noviembre de 2010

No era el momento ni era el lugar
pero ahí estaban mirándose a los ojos,
expectantes.

Pupila contra pupila,
vigilan la mirada del otro
buscando un mínimo gesto de anhelo contenido,
de rendición tardía,
de tiempo inconfesado entre renuncia y renuncia...

No era el momento ni era el lugar,
pero ahí estaban...
                             ... ahí están.

1 comentario:

Abel Santos dijo...

Qué poema más hermoso Carmen. A todos nos ha pasado, y hemos retenido, estos momentos en los que el instante se abraza con la eternidad. Un abrazo!!